San Rafael y El Espinar

El Espinar

San Rafael y El Espinar están unidos por el Camino del Ingeniero, un sendero de unos 12km de recorrido que discurre por la falda norte de la Sierra de Guadarrama. Estos municipios se encuentran en el suroeste de Segovia, siendo puerta de entrada a Castilla León desde Madrid. El Espinar se encuentra en un anfiteatro natural rodeado de montañas, como Cabeza Líjar 1.823 m., Alto del León 1.511 m., La Peñota 1.945 m., Montón de Trigo 2.155 m., Pico del Pasapán 2.001 m., Cabeza Reina 1.479 m., Cabeza Renales 1.757 m., Cerro del Caloco 1.567 m. y el Pico del Oso con 2.196 m. Es una zona con mucho gradiente altitudinal y como con la altura cambian las condiciones bioclimáticas, encontramos varios ecosistemas: matorral pastizal de alta montaña, pinar de pino silvestre, robledal de melojo, encinar y bosque de ribera.

Rutas: existen varias posibilidades para recorrer todo o parte del Camino del Ingeniero en sus dos direcciones. Todas ellas se caracterizan por discurrir en su mayor parte por senderos y trialeras con fuertes pendientes tanto de subida como de bajada. Éste es un spot para riders con cierta experiencia en el mountain bike, ya que el desnivel acumulado y el tipo de terreno por el que se rueda puede convertirse un problema para aquellos que se están iniciando en este deporte.

Tipo de terreno: principalmente senderos y trialeras. El Camino del Ingeniero es un continuo sube y baja, independientemente del sentido en el que lo realicemos. Para acceder a él rodaremos por exigentes subidas y bajadas técnicas. Un sitio ideal para la práctica del all-mountain y enduro.

Época del año: es una zona enmarcada dentro del área de clima mediterráneo-continental, pero al ser una zona de montaña orientada al norte donde la altitud es superior a los 1.000 m., resulta más fría y tiene más precipitaciones en forma de agua y, cuando la temperatura es menor de 0º C, de nieve. Hay mucho gradiente altitudinal, por lo que se producen cambios climáticos acusados existiendo en las montañas un descenso térmico del aire de 0,5-0,6º C cada 100 m de altitud. Por tanto, aunque está dentro del área mediterráneo-continental, los inviernos son más fríos -con frecuentes heladas y nieves- mientras que  los veranos son menos cálidos y más agradables. Recomendable para los meses de primavera, verano y otoño.