San Lorenzo del Escorial es un municipio de la Comunidad de Madrid en la vertiente suroriental de la Sierra de Guadarrama, al pie del monte Abantos y de Las Machotas. Dentro de su término municipal se encuentran dos emblemáticos monumentos: el Monasterio del escorial y el Valle de los Caídos. Hacia el sur, el municipio discurre por el llamado Circo de El Escorial, valle flanqueado por las laderas meridionales de Abantos y las septentrionales de Las Machotas. Hacia el norte, recorre la vertiente suroriental de Abantos hasta el paraje de Cuelgamuros, donde se encuentra el Valle de los Caídos, cerca de la linde con Guadarrama. Hacia el suroeste, el municipio desciende hasta El Escorial, a través de los parques y jardines de la Casita del Príncipe.
San Lorenzo de El Escorial pertenece a la cuenca del río Guadarrama. Los riachuelos que nacen en el Monte Abantos van a parar al río Aulencia, que nace en Las Machotas. Algunos de los arroyos sanlorentinos son contenidos en pequeños embalses, situados dentro de su término.
Rutas: las Zetas, el alto del Malagón, Abantos, San Juan, El refugio de la Naranjera, el Cervunal, los Vascos, Larios, la Lápida, Peguerinos, Tovar… son algunos de los lugares que visitamos y recorremos en nuestras rutas por la zona, orientadas a riders con un nivel físico/técnico medio y avanzado. A pesar de ello también se pueden diseñar rutas más suaves, aunque los desniveles de la zona nos exigen un mínimo de forma física para afrontarlas con éxito.
Tipo de terreno: pistas, senderos, veredas y trialeras… un terreno variado y perfecto para la práctica de cualquier modalidad de mountain bike. Por su orografía y su desnivel, la zona nos ofrece las mejores posibilidades para la práctica del enduro y del all-mountain. Las raíces y piedras que tapizan sus senderos revirados entre árboles hacen de este spot uno de los preferidos por los riders más endureros.
Época del año: Su altitud mínima, por encima de los 1.000m, y sus bosques, nos permitirán disfrutar de unos grados menos de temperatura en el verano y la primavera. En invierno podemos encontrar nieve en las cotas más altas, aunque no es habitual en cotas bajas, por lo que podemos disfrutar de la zona a lo largo de todo el año.